HOY PUEDE SER UN GRAN DÍA.
Hoy puede ser un gran día, plantéatelo asíAprovecharlo o que pase de largo depende en parte de tiDale el día libre a la experiencia para comenzarY recíbelo como si fuera fiesta de guardarNo consientas que se esfume, asómate y consume la vida a granelHoy puede ser un gran día, duro con élHoy puede ser un gran día donde todo está por descubrirSi lo empleas como el último que te toca vivirSaca de paseo a tus instintos y ventílalos al solY no dosifiques los placeres, si puedes derróchalosSi la rutina te aplasta dile que ya basta de mediocridadHoy puede ser un gran día, date una oportunidadHoy puede ser un gran día imposible de recuperarUn ejemplar único, no lo dejes escaparQue todo en cuanto te rodea lo han puesto para tiNo lo mires desde la ventana y siéntate al festínPelea por lo que quieres y no desesperes si algo no anda bienHoy puede ser un gran día y mañana también.
Joan Manuel Serrat
Si has leído el texto y no has podido evitar cantar, pásate por el enlace y disfruta.
Serrat nació y creció en un barrio obrero de Barcelona rodeado de personajes variopintos y del ambiente de la calle, que marcaron algunas de sus letras. Durante su adolescencia comenzó sus estudios de Ingeniería Agrónoma que compaginaba con su afición a la guitarra. Pero era mayor su pasión por la música que por su profesión, motivo por el que al terminar sus estudios decidió presentarse a un programa de la radio catalana interpretando sus primeras canciones.
Gracias a ese programa, llamado Radioscope, recibió su primera oferta de contrato y grabación de su primer EP, Una guitarra (1965), compuesto por cuatro canciones en catalán. Al año siguiente publicó su segundo EP, Ara que tinc vint anys (1966), con otros cuatro temas en catalán.
En el año 1968 compuso sus primeras canciones en castellano, que se publicarían en el álbum La Paloma (1989), y fue fichado para participar en varias películas como Palabras de amor (1968) o Mi profesora particular (1972). Esto molestó a sus seguidores catalanes, que comenzaron a acusarle de traidor de la causa catalanista, ante lo que tuvo que defenderse en base a que su lengua materna (su madre nació en Zaragoza) era también el castellano.
Rodeado de polémica, el cantautor se vio envuelto en otro gran escándalo al ser considerado para participar en el Festival de Eurovisión interpretando el tema La la la. La canción, compuesta por el Dúo Dinámico con cierto estilo poético similar al de Serrat, estaba escrita en castellano, por lo que fue presionado por los miembros de la Nova Cançó para que exigiese cantarla en catalán o, en su defecto, un párrafo en catalán. Esta propuesta fue denegada y finalmente fue Massiel quien puso voz al tema, logrando ganar el festival.
Desde finales de los 60 y principios de los 70, Joan Manuel Serrat desarrolló su carrera en Hispanoamérica tras participar con gran éxito en el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar con el tema Lucía y el IV Festival Internacional da Canção Popular de Río de Janeiro con la canción Penélope, con la que ganó los premios a mejor letra, música e interpretación. A raíz de la repercusión mediática adquirida, realizó giras por Argentina, Chile y Uruguay.
Durante estos años publicó el disco Dedicado a Antonio Machado, poeta (1969) con el que comenzó a sufrir los primeros vetos de su carrera. Tras él llegó Mi niñez (1970), con varios temas también vetados. Por estas y otras circunstancias, el cantante comenzó una etapa de protesta que culminó con el encierro junto a otros artistas en el Monasterio de Montserrat en protesta contra el proceso de Burgos.
En los años siguientes publica uno de sus álbumes más relevantes, Mediterráneo (1971), uno de sus discos más emotivos y personales que se coló rápidamente entre los discos más vendidos en España, su tributo al poeta Miguel Hernández con el disco homónimo en 1972 y un LP en catalán, Per al meu amic (1973), uno de los más trabajados y mimados de su trayectoria.
En 1974 consigue que le retiren el veto y participa en un programa de TVE y en la película La ciudad quemada. Sin embargo, este hecho no evitó que continuase declarándose opositor al régimen franquista y participando en protestas sociales que le causaron arrestos y multas. Incluso emitió unas problemáticas declaraciones en contra del franquismo mientras estaba en México de gira, motivo por el que se vio obligado a exiliarse en el país durante un año y sus trabajos discográficos volvieron a ser censurados. Como protesta personal compone algunos de sus temas considerados como más combativos, consiguiendo que otros países bajo dictaduras como Chile le vetasen la entrada.
Serrat regresa a España en el año 1977, ya finalizado el régimen franquista, incorporándose a la vida social con precaución hasta la promulgación de la ley de amnistía, gracias a la que pudo reincorporarse a su actividad musical con total normalidad.
Desde entonces ha publicado numerosos y exitosos álbumes como En tránsito (1981), un disco influenciado por la muerte de su padre, Cada loco con su tema (1983), cuya presentación en el Luna Park en Argentina supuso un hecho histórico y símbolo del triunfo de la democracia en el país, Utopía (1992), Nadie es perfecto (1994), Sombras de la China (1998), Versos en la boca (2002), Hijo de la luz y de la sombra (2010) o La orquesta del Titanic (2012), con Joaquín Sabina, que a lo largo de los años compagina con el lanzamiento de discos en catalán, discos en directo y recopilatorios.
En el terreno personal, en el año 2005 hizo pública su enfermedad, que requería de quimioterapia para reducir un carcinoma en la vejiga y de la que se recuperó con normalidad, pudiendo continuar su vida profesional con conciertos y giras.
Es padre de tres hijos, Manuel, fruto de su relación con la modelo catalana Mercè Domènech, y María y Candela, de su matrimonio con Candela Tiffón.
Por toda su trayectoria ha sido reconocido con varios títulos como Doctor Honoris Causa gracias a su contribución a la música y literatura española, además del Grammy Latino en 2014 a Persona del año.
